Hoy, a las 18.30 horas, en Espacio Mercado, el esperado coloquio sobre novela negra experimental con Eduardo Iglesias y Ray Loriga, y una novela de culto, El vuelo de los charcos (Trama Editorial). Presenta: Maica Rivera, de Literocio.
Eduardo Iglesias compartirá sus impresiones sobre los juegos de la novela negra tradicional en el marco de la narrativa actual con Ray Loriga (Premio Alfaguara de Novela 2017), prologuista de su obra. Lo clásico y lo nuevo, el homenaje y la autoparodia, arquetipos y clichés, la nueva crítica social y el espíritu noir, hermandades con lo distópico, nuevos caminos y formatos.
Eduardo Iglesias viene a sacarnos de nuestra zona de confort.
Lo dinamita todo. Pero no es un postmoderno: es un romántico.
¿Desde la distopía? ¿Hacia la utopía?
Un futuro apocalíptico. Una macroconciencia opresora: la dictadura del Gran Orden defendida por el Teniente Samuel Negro. Una horda de guerrilleros disidentes que cierran filas en torno a la memoria de un héroe llamado J. Solo. La búsqueda de una misteriosa mujer. Un viaje de liberación interior, un homenaje al género negro.
George Orwell, Cormac McCarthy, Baudrillard, Star Wars, Blade Runner.
La esperanza, palabra clave de la página 18, palabra clave a 18 páginas para el final. Podemos estar ante una novela de culto.
ENTREVISTA A EDUARDO IGLESIAS
¿Cómo se lee esta novela?
Con mucho cuidado. Y despacio.
¿De principio a fin?
No necesariamente, también se podrían leer de forma independiente los relatos por los que serpentea la novela, que está dividida a su vez en dos partes bien diferenciadas. Porque es una novela sobre la libertad escrita con total libertad creativa. Si algo me obsesiona es ser original.
Y luego está el cuadernillo central con su historia de género negro clásico…
El “Pequeño cuaderno encontrado entre los escombros de la ciudad amurallada” es un homenaje al cine negro de los años cuarenta, un homenaje discreto y elegante al papel, al libro como objeto. Al “Manuscrito encontrado en Zaragoza”, ¿por qué no?
Es un libro exigente…
Es una novela sobre la libertad, y soy un escritor muy literario. Avanzo desde una imagen hacia un destino que desconozco, sin ser consciente de mis influencias. Intento hacer cómplice al lector de mi presente creador, para sorprendernos juntos.
¿De crítica social?
Sí. Buscada. El escritor debe ser un observador implacable de la realidad.
¿Alguna pista para la lectura?
Guiarse por la intuición antes que por el razonamiento.
Cada lector tendrá su propia novela. Tantas novelas como lectores, literalmente.